Celebramos con alegría el inicio de la Navidad como la gran familia contralora y en una sola Venezuela Unida por la Paz, abriendo los brazos a la época dorada que ilumina los corazones de las y los venezolanos; agradeciendo a Dios por bendecirnos con la unidad en esta tierra llena de fe y esperanza.

Con emoción, damos la bienvenida a estos días llenos de amor, donde la luz del pesebre nos recuerda que la solidaridad y la paz son los mayores regalos.

Este primero de octubre, servidores y servidoras de la Contraloría General de la República Bolivariana de Venezuela nos unimos en fraternidad, compartiendo risas, cantando al ritmo de la Parranda de la CGR, los villancicos y las gaitas que llenan el aire de festividad.

Cada nota y cada paso de baile son un homenaje a la paz y la alegría en la estación más esperada del año, en la que honramos al Niño Jesús por su infinita bondad y por guiarnos en el camino de la justicia y la hermandad.

En medio de la armonía que nos une, preparamos con cariño la mesa navideña, reviviendo las tradiciones que nos hacen sentir el calor del hogar.
Cada plato, cada canción y cada abrazo tejido en estas fechas son testimonio del amor que nos define como pueblo, mientras renovamos el compromiso de servir con dedicación y alegría al año que está por llegar.